lunes, 19 de noviembre de 2012

¡Caminando!


Birds flying high you know how i feel
sun in the sky you know how i feel
reeds drifting on by you know how i feel
it's a new dawn it's a new day it's a new life for me
and i'm feeling good
Fish in the sea you know how i feel 
river running free you know how i feel 
blossom in the tree you know how i feel
it's a new dawn it's a new day it's a new life for me
and i'm feeling good
Dragonfly out in the sun
you know what i mean, don't you know 
butterflies are all having fun
you know what i mean 
sleep in peace
when the day is done 
and this old world is a new world and a bold world for me
Stars when you shine you know how i feel 
scent of the pine you know how i feel 
yeah freedom is mine 
and you know how i feel
it's a new dawn it's a new day it's a new life for me
and i'm feeling good
Ooooh
(freeer than you)


Feeling good (MUSE)

Pues eso, que es un nuevo amanecer, es un nuevo día, es una nueva vida para mí, y me siento bien... ¿Repite, repite, repite y la mentira será verdad? No, pero un poco de "Venga, campeona, que tú puedes" nunca está de más... ¡Caminando!

domingo, 11 de noviembre de 2012

Apasionante...

Dos personas conversan animadamente hasta que se une otra con la que no contaban. Hay un silencio inicial, miradas compasivas. Cada una busca un tema con el que mantener una conversación cómoda hasta que llegue el momento de separarse y seguir con sus vidas. O con sus conversaciones animadas.

Ahora llegaría el momento en el que empiezo a montarme mi película y empiezo a inventarme posibles finales para la historia:

Final 1. Solamente necesitaban romper el hielo. Crean una nueva conversación, una para las tres, de esas que molesta interrumpir cuando llega el momento de bajar del autobús.

Final 2. Se baja una de las dos del principio. Las que se quedan empiezan una conversación nueva pero, aunque la segunda habla con la tercera, tiene en mente lo a gusto que estaba con la primera.

Podría seguir así un rato, planteando distintos finales en los que unas u otras salieran mejor o peor paradas... Pero no hizo falta: llegó su parada y bajó. La tercera.

Esperaron a que se cerraran las puertas, se miraron entre ellas (dos miradas cargadas de intención), se les escaparon risitas y comentarios sobre la otra (cuyo único pecado era haber sido "la otra") y al poco retomaron sus vidas. Y sus animadas conversaciones sobre cambiar las cortinas de la cocina. Apasionante...

domingo, 5 de agosto de 2012

Dos meses (más) que casi son tres

Casi dos meses de silencio... Bueno, 'silencio' (estoy más charlatana que nunca... Pero hablo de cosas que no encajan aquí... Y, aunque no creo que haya grandes historias o grandes enseñanzas, me gusta que algo me llame la atención, que coja forma, la que sea, y terminar escribiéndolo... Y me gusta que lo mucho que 'hablo' ahora no tenga sitio aquí).

Tres meses y pico desde "todo el mundo tiene derecho a contar su historia, yo me tomo la libertad de inventarme la historia de desconocidos". En eso consiste el juego: un detalle, ideas asociadas (que pocas veces son fieles a la realidad), y voilà.

Dos años y pico (largo) desde la "idea de escribir un blog... Y de llevarlo (más o menos) al día...". Creo que 40 entradas en dos años y pico (largo) no son ninguna hazaña... Y que, por tanto, "lo de llevarlo (más o menos) al día" ha sido más menos que más... Pero no va de lamentos la cosa. También he conseguido ser 'comprometida', que me gusta mucho a mí eso de coger algo a pincho, encontrar otra cosa que coger a pincho y dejar que la anterior quede en segundo (en el mejor de los casos) plano.

Dos años y pico (largo) después, la cosa sigue... Con sus más y sus menos... Sus más menos que más, sus paso a paso y sus "keep walking".

Dos meses (más) de silencio... Este sin comillas. Dos meses (más), que casi son tres.

jueves, 7 de junio de 2012

A veces se agradece enterarse de lo que pasa alrededor...

Creo que alguna vez he hablado de lo de que el humor se extiende... "Always UP! felicidad contagiosa", Validation, "Además, la felicidad no es un derecho sino un deber, porque si no eres feliz estás amargando a todo el barrio" (de No estás deprimido, estás distraído, por Facundo Cabral), los árboles de los problemas y los hilos blancos se han convertido en máximas que intento llevar a mi día a día...

Hoy todas estas teorías me han dado en la cara. Situación A: voy camino del Metro, paso por un edificio del barrio, va el típico cartero con su carrito por delante. Es encantador, la verdad. Saluda con educación y un humor inmejorable a los que entran y salen. Los vecinos le corresponden, le sonríen, le preguntan si hoy va cargado... Por un momento se me ha pasado por la cabeza una escena de El show de Truman, todo muy coreografiado, tan bonito que no parece de verdad. Situación B: voy camino del Metro (sí, hoy he ido mucho en Metro...), cruzo por una callecita que solo tiene un carril en cada sentido. Dejo pasar un coche que va despacito. Le sigue otro, que se ve que tenía prisa, dando toquecitos de claxon (supongo que en la autoescuela te enseñan a pisar el acelerador cuando el de atrás toca la bocina... Ni idea, sigo sin apuntarme a la autoescuela). El primer coche se detiene, el segundo continúa. La señora que iba en el primer coche baja, llamando de todo (amargao, impotente y alguna perla más) al señor con prisa.

Hasta aquí, los hechos. Divaguemos un poco... Situación A: los vecinos de la urbanización salen de buen humor, han aprendido del cartero y van repartiendo buen rollo allá por donde pasan. Situación B: la señora del coche entra en la tienda de fotocopias y paga su mal humor con el señor de la tienda de fotocopias, que no tiene culpa, pero se la lleva... El señor de tienda de fotocopias se queda tocado y atiende al próximo cliente de aquella manera... Y así, suma y sigue...

Sí, sí, he sido super demagoga... Lo sé... Pero tampoco cuesta tanto ser un poquito majo y hacerle la vida un poquito más fácil a la gente, ¿no?

NOTA MENTAL: nada de esto habría sido posible si hubiera ido escuchando música... A veces se agradece enterarse de lo que pasa alrededor...

domingo, 29 de abril de 2012

Complicada vida la de los narcisistas...

Le gustaba lo que veía al otro lado del espejo: un chico de mirada penetrante, seguro de sí mismo, bien afeitado... Atractivo, en definitiva. Se acercó a él con el deseo de besarle, pero su cara chocó contra el espejo.

En ese momento se dio cuenta de la tragedia que suponía estar enamorado de sí mismo: nunca abrazaría a la persona a la que amaba, ni sería abrazado por ella. No podría besarla. No podría apoyarse en ella. Nunca le contaría sus lamentos, ni escucharía sus alegrías.

Complicada vida la de los narcisistas...

lunes, 26 de marzo de 2012

Un "esto es lo que hay"

En sus tiempos mozos, siguiendo la moda de la época, llevaba unas cejas tan finas que hoy solo quedaba un trazo hecho con lápiz de ojos negro. Un trazo perfecto en su ceja derecha, pero irregular en la izquierda, en el intento de sortear una verruga que se alzaba a escasos milímetros del párpado.

Se había ganado la vida por dos duros (y no por mucho más cuando España se pasó al euro). Se notaba y a ella le traía sin cuidado. Es más, se sentía orgullosa de que se notara, de cazar las miradas reprobadoras de las damas. Orgullosa de ser transparente, de no tener vuelta de hoja, de no sorprender, de no descolocar... Cualidades que asociaba ella con ser digna de confianza. Seguro que esas damas habían jugado sucio alguna vez. Ella no, ella podía estar en la mierda, pero siempre había jugado limpio... Un "esto es lo que hay".

Ni más ni menos...

sábado, 17 de marzo de 2012

Viaaajar en tren / es lo mejor

Las manos apoyadas en el cristal, como un niño ante el escaparate de una pastelería. El vidrio se empaña bajo sus dedos, calientes, que contrastan con el frío de la pantalla. Aunque retire las manos, cosa que no parece que vaya a hacer en los próximos minutos, la huella permanecerá unos segundos más, reacia a abandonar su sitio, como él. El conductor como si la cosa no fuera con él, indiferente ante un paisaje que tiene fascinado al improvisado espectador. ¿Está vigilando el hacer del conductor? ¿Fantasea con ser él quien controla la máquina? ¿Siente curiosidad por ver a través de sus ojos?

Puede que al otro lado del cristal las cosas sean más interesantes que dentro del vagón, con su centenar de personas mirando por la ventana, leyendo libros, subrayando textos, escuchando música, mostrando devoción por su smart phone, dando cabezadas... No. Sin duda, las personas que dan cabezadas pueden ser más entretenidas. Están las que nada más sentarse cogen la postura para echarse un sueñecito, las que caen en los brazos de Morfeo mientras leen y despiertan sobresaltadas intentando fingir que no ha pasado nada, las que tienen la cabeza descolgada y reabrirán los ojos con dolor de cuello, las que se balancean como péndulos y dan respingos, las que duermen con la boca abierta, las que terminan apoyándose en el de al lado, las que resoplan...

Viaaajar en tren / es lo mejor...

jueves, 15 de marzo de 2012

No todos pensamos así...

Dos monedas olvidadas en un banco, una discusión tonta. "¿Quieres elegir a quién se las das o prefieres dejárselo al azar? Las decisiones tomadas al azar también merecen respeto: a veces no se encuentra un motivo suficiente para preferir una cosa entre varias, a veces se ve igualmente justificado hacer una cosa u otra... El azar es perfectamente válido".

Un simple vistazo a su alrededor y había candidatos más que suficientes para recibir el objeto de la discusión: un rockero de la vieja escuela cantando clásicos con su guitarra, un joven arrancando dulces melodías a una flauta travesera, un hombre de mediana edad que caminaba descalzo por los paseos del jardín.

Un chico moreno, con gafas, se acerca al banco mientras lee A sangre fría. Sin levantar los ojos del libro, se sienta en el banco, sobre las monedas. Se levanta contrariado al notar la existencia de algo entre su cuerpo y el banco. Un par de monedas que convertirá en un par de cafés con su cita. Cuando tenga a bien llegar, claro. Puede que lo de que las chicas son impuntuales sea un tópico. Esta, sin duda lo es...

La historia del chico que leía mientras esperaba a la chica podría dar más de sí, pero no se lo dejó al azar. No todos pensamos así...

lunes, 20 de febrero de 2012

And the memory remains...

12 pm and my dusty telephone rings
Heavy head up from my pillow
Who could it be? I hope is you... There

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A veces oigo el tiembre y me gustaría que fueras tú... Con un puñado de mensajes para borrar o unas uñas para pintar...

Parece que el tiempo hace olvidar cosas, y te esfuerzas por plasmar todo lo que recuerdas en una lista, para no olvidar... Imaginas que te dejas cosas en el tintero, pero te consuelas pensando en que siempre habrá tiempo para añadirlas. Y como la memoria es caprichosa, un día cualquiera te asalta un recuerdo no registrado, y casi hueles el pintauñas, y observas el pulso inquieto, afectado por cafés y pastillas, y escuchas el tono, perezoso pero delicado, pidiendo que apoye la mano en tu pierna...

Regresan esas anécdotas que ya te había contado mientras apretabas una y otra vez el mismo botón para dejar la bandeja de entrada libre de mensajes y dar opción a que volviera a llenarse en un tiempo...

No sé si eran un puñado de mensajes, si son un puñado de recuerdos... Pero que ahí se queden, y que vengan otros nuevos.

And the memory remains...

viernes, 3 de febrero de 2012

Era realmente grande esa avispa...

Viernes, 14:32. El metro va lleno de gente. Una avispa sobrevuela sus cabezas, pero van todos tan ensimismados en sus "Llego tarde", "¡Mierrrrrrrrda! ¡Me he dejado las llaves en casa!", "Tengo que posponer esa reunión como sea", "Si aquí son las 2 y en Canarias es la 1, eso significa que..." que nadie ha reparado en ella. Es una avispa realmente grande; es raro que nadie, absolutamente nadie, la haya visto. Porque, admitámoslo, hay personas que pierden la compostura ante los "bichos-que-pican" y el metro va a reventar. Sería difícil resistir la tentación de desvelar su presencia y provocar el caos. ¿Cuántos forzarían una postura relajada sin quitarle ojo? ¿Bajaría alguno en la siguiente estación? ¿Tratarían de espantarla con un periódico? ¿Algo peor? Nada, ni un respingo. Si la avispa fuera consciente de las reacciones que podría provocar y de lo desapercibida que estaba pasando, se ofendería. Peeero, como la ignorancia da la felicidad, ahí estaba ella, tan pizpireta, revoloteando por el techo. Ahora entro en la rejilla, ahora salgo. Ahora me acerco a las barras, ahora a las luces. Sol, Sevilla, Banco de España, Retiro, Príncipe de Vergara... Y nada. La avispa, a sus anchas, sintiéndose la reina del vagón, aunque no captara ni una mirada...

Y la chica vuelve la cabeza hacia su libro. Sigue en la página por la que lo abrió, unas cuantas paradas antes. La historia que se abría paso al otro lado de las páginas era más interesante y era solo suya. Y seguiría siéndolo, estaba dispuesta a guardar el secreto. Goya. Era realmente grande esa avispa...

miércoles, 11 de enero de 2012

Feliz cumpleaños

Una lágrima se deslizó por su mejilla, lenta al principio, apresurada cuando se pronunció la pendiente. Una lágrima un mes después, al reparar en que había estado tan ocupada que no se había parado a pensar en ella detenidamente, a echarla de menos... A ponerse triste. Un día casi pregunta por ella, por costumbre... Qué cosas, ¿eh? Cómo es el ser humano... Que se acostumbra a algo y cuesta carros y carretas sacárselo de encima... No le disgustaba seguir con ella en la cabeza, ni le disgustaba ponerse triste. Es más, quería que siguiera siendo así...

Empezará un año, sin ella. Y así será de ahora en adelante. Cada año que empiece será un año más sin ella, intentando mantener vivos todos y cada uno de los recuerdos.

Y cada 11 de enero será suyo. Feliz cumpleaños.